Autobiografía de Lucas Bernath

Desde chico la relación mía con la lectura nunca fueron de las manos. Recuerdo que en mi casa siempre hubieron libros y las ganas de mi mamá de que yo me siente a leer siempre estaban. Tanto en mi casa como en el colegio me mostraban libros pero nunca me engancharon. Recuerdo que antes de dormir me leían un cuento y eso me gustaba, pero leerlos yo no. Hasta el día que me di cuenta que los libros que me dan ganas de leer son los que me atraen mucho por su portada y me los puedo imaginar como una película. El primer libro que recuerdo es el de "la bruja Berta", lo leí muy de chico, a los 6 años y me encantaba, lo podía leer todos los días y no me cansaba. Era un cuento corto con poca lectura y mucha imagen, pero lo que decía lo leía cada vez con más interés para ver si encontraba algo nuevo. Más de grande mi unión con la lectura todavía no encajaba, no encontraba algo que me den ganas de sentarme a leer. En mi época por la primaria  me empezaron a comprar muchas revistas con cosas que me interesaban, se llamaban "Tiki Tiki" y hablaban de muchas noticias y juegos de fútbol. Todos los viernes iba a lo de mis abuelos y nos esperaban a todos los nietos con una revista para cada uno, nos pasábamos horas leyendo y enterandonos  de cosas que no sabíamos.
Mi lectura fue de a poco avanzando más, ya que fui creciendo y tuve que empezar a estudiar. A la hora de sentarme a leer un libro desde chico hasta hoy en día necesito estar solo, con silencio y haciendo algo, caminando, pateando una pelota o ir moviendome por distintos lugares de la casa, es algo fundamental, si no me cuesta mucho. Sentarme en una biblioteca o en un bar a leer no puedo, me cuesta demasiado. Más adelante ya entrando en la etapa de la secundaria empecé a leer libros más grandes. Me gustan los que son de historia, los verídicos. Me encanta leer algo escrito por otra persona y ponerme en sus zapatos.
Ya cuando arranque a tener teléfono y empezar a investigar un montón de noticias, me empecé a informar más de todo. Me encanta prender el teléfono y abrir un diario online y empezar a leer un poco de todo. Mismo en mi casa se compra el diario y lo leo mucho, me encanta. La lectura en mi vida nunca estuvo muy presente la verdad, igualmente hay libros que me han marcado. Cómo el de mi bisabuela, sobreviviente del holocausto. En el que contaba muchas cosas muy fuertes por las que le paso y le tocó vivir. Es un libro que me sentí listo para leerlo a los 15 años y fue algo muy impactante. También otro es el principito, que lo leí en la primera y me hizo ver cosas que quizás nunca me puse a pensar, lo leí de grande otra vez y la verdad que me gustó mucho.
Cómo ya conté, la lectura en mi es un viaje de idas y aveces vueltas. Rara vez me enganche con un libro y tuve muchas ganas de leerlo. Hoy en día igual estoy empezando a experimentar mucho más lo que es la lectura de un libro, de a poco me va atrapando cada vez más.

Comentarios

  1. Con placer o sin él, la lectura siempre es un ejercicio de libertad que sólo es posible llevar a cabo si se sabe leer de todas las maneras posibles; hay muchas y en la escuela aparecen y se encuentran en la comunidad de lectores que somos mientras compartimos lecturas. De ahí que nuestro trabajo tenga tanto de intensidad, de atracción y rechazo porque leer se convierte en leerse.
    Ojalá, le encuentres sentido al desafío de leer en la escuela.
    Gracias por compartir.

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